QUERER SER RACIONAL ME ESTA SALIENDO CARO

Querer ser racional me está saliendo caro. Pierdo amistades y alguna gente me evita. No me duele pero lo confirmo. Generalmente rechazo lo tradicional y nacionalista que no tiene un fundamento vigente. Porqué preguntas esas cosas! Me dicen demasiado a menudo. Una pregunta típica de Miguel! Oigo de rato en rato sin mucho agrado. Créo que podría haber sido un buen inquisidor pero que también, tarde o temprano, me habrían atado a una hoguera.
Con los antroposofos de mi trabajo, con la testigo de Jehová de mi mamá, con gente que crée en la política, con cristianos y musulmanes, con la gente que me invita a ver el futbol o el festival de Eurovisión o a bailar salsa (tres cosas que mo me gustan), con la gente a la que le pregunto por la razón de la navidad. Algunas cosas las rechazo con orgullo. Otras simplemente no tienen ninguna implicación ética.
Acupuntura tailandesa (que no usa aguja sino unos palitos), la tradición sueca de celebrar la Anunciación de María comiendo waflers (Si creen que la tradición es ridícula la explicación lo es más) o el corazón como origen de los sentimientos son los tres botones de muestra de esta semana. Tres discuciones inutiles en las que me véo envuelto. Y mi pecado no es mi razonamiento, sinó el mero hecho de atreverme a mencionarlo con signo de interrogación y curiosidad. Como si cualquier pavada que dice la gente fuera un dogma de fé. Para mí el problema no es que la gente créa en estupideces, que acaso sea inherente a la especie humana. Para mi el problema es que nadie quiere compartir conmigo el proceso mental por el que llegan a sus tontas conclusiones. Y eso es lo que me interesa finalmente, porque así me será más fácil no cometer esos errores u otros similares. Más que saber como El Señor de los Milagros sea milagroso o no, me interesa ver el recibo de que la información pasó por el cerebro luego de ser una cosa inculcada por la tradición. La cosa es que la mayoría de la gente no es egoista o quiera mantenerme fuera de esa "élite del Secreto". La cosa es que la gente, mucha gente, no se interesa en saber que es lo que crée y lo achaca a la tradición o al conocimiento esotérico. Prefieren decir que son esto o lo otro que cuestionárselo.