Usually, I wake up at half past six in the morning and after a quick shower and breakfast like around seven I lay on the sofa and finish my coffee with some twenty minutes of daydreaming. Yes, I just lay there facing my bookshelves and doing absolutely nothing but thinking about nothing special. Almost like when one is about to sleep (only without the sleeping part). Thinking about myself, or people, or books, or movies or just staring in almost an autistic glare. Letting the moments just glide and go. Enjoying these peacefull minutes has become some sort of a thing for me. And no, I'm not into meditation or anything like that. And no, not even a cigarett disturbs me at this time of the day. I guess it's just a luxury i treat myself with while i can afford it. Twenty or twenty-five past seven, time to move and go ahead with the day. After looking for pics to ilustrate this Dolce farniente i may say I'm not the only one.
El, al parecer, casi perdido arte del afiche de cine. En esta galería de afiches de cine de Tarzan les dejo los de las películas de Johnny Weissmuller, el más recordado de todos los de las pantallas grande y chica. 
DeNiro solía ser en sus años más icónicos un muchachón casi demasiado responsable con su trabajo (cuando hizo Los Intocables (De Palma, 1987) vestía calzoncillos de seda, que nunca se ven en la película, sólo para compenetrarse con el personaje de Capone, que los prefería y la subida de peso para El Toro Salvaje (Scorsese, 1980) es recontra conocida). La cosa es que para Taxi Driver (Scorsese, 1976) se enroló de taxista y por ahí encontre una foto de su "taxicab driver's license". Me encanta lo ordinario de su look, el semi anonimato de su nombre. Lo real en aras de lo irreal. Hoy en día es lugar común hacer este tipo de locuras para "compenetrarse con el personaje", es casi parte del marketing para la película. Pero se me ocurre que el buen Bobby fue sincero en su excéntrico fanatismo. En su 
No, nada parpadéa sinó en tu cerebro./Nope, nothing is blinking but in your brain.
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